martes, diciembre 26, 2006

Mal Servicio

No es la primera vez que escribo de esto, creo que tampoco será la última, por mala suerte.  Es que simplemente es inaceptable el comportamiento de algunos ecuatorianos en lo que a estándares de servicio refiere.

Esta vez el turno es de Ferrisariato, la empresa del grupo "Mi Comisariato", tan conocido por todos.  Resulta que voy a Ferrisariato el día 23 de diciembre para poder comprar un lavabo porque el de mi baño recibió el ataque atroz de mi sobrino político que en un abrir y cerrar de ojos lo destrozó, vayan ustedes a saber como.

El lavabo se partió lateralmente quedando literalmente inutilizable, pero la base del lavabo, una pequeña torre de cerámica, por esas casualidades de la vida permaneció intacta.

Así que voy al local del Ferrisariato que queda en la Avenida Orellana y encuentro el lavabo que deseo.  El vendedor me dice cuanto cuesta y de repente se me ocurre que no necesito una torre nueva, solo el lavabo.

El vendedor, otro mongoloide de la subraza que parece abundar en tierras ecuatorianas me dice que no lo podía vender por separado, ya saben ustedes porque: "Política de la Empresa".

Me resultó desagradable, pero en fin, necesitaba el lavabo y le pedí que me lo despacharan para llevarlo en ese momento.

Fue allí cuando recibí la fatal sorpresa.  Supuestamente, y digo para todos mis lectores, por sentido común, si tienes un producto en percha, si le pregunto el costo al vendedor, si el fulano me dice que no lo puede vender por separado, entonces: ¿Cómo, por María Madre de Cristo, cómo?, repito, ¿Cómo, por el amor de Dios, se les puede ocurrir venir a decirme después que no podían venderme el artículo?.

La excusa.  La más pendeja, la más absurda, la más ridícula, no tenían la torre que hace juego, la que yo no necesitaba en stock.

Me armé de paciencia, decidí que esta vez el verdadero Santhros, el guerrero ecuatoriano al que le fluye fuego en los conductos sanguíneos, esta vez el impaciente, el atroz, el Auténtico Ecuatoriano no iba a responder ferozmente a esta idiotez.  Le dije al vendedor, pana, no me importa si no viene con la torre, me lo llevo, eso si, el precio debe ser menor.

Allí fue, exactamente después de eso.  El vendedor pronunció nuevamente la serie de palabras más estúpida que se pueda espetar a un cliente.  "No se puede, es política de la empresa, si gusta hable con el supervisor".

Y por supuesto que fui a buscar a la supervisora, sólo para recibir la misma respuesta inequívocamente estúpida.  "No se puede, señor, si gusta busque en otro local".

A esas alturas del partido el Auténtico Ecuatoriano que reside en mi ya había salido a superficie.

- Ok.  Lo que me dice es absurdo, dígame que no quiere venderme, porque no confía en mi o porque mi dinero no vale en este local, pero no me haga creer que no le interesa vender, por favor.
- Señor, busque en el local de Plaza Mayor, allí hay.
- Allá voy.  Ah, y GRACIAS POR NADA.

Volé a Plaza Mayor.  Estaba endiablado, pero que carajo, allá iba.  Solo para recibir de sopetón otra obra de la negligencia y del absurdo.  

- No, señor, las bases de ese lavabo se quebraron, pero si gusta se lo puede llevar, pero al precio original.
- (No jodas, pelamazo) Hágame un favor, puede contactar a los otros Ferrisariatos para ver que local los tiene.
- No, no puedo, señor, porque no se que código tenga el lavabo que está buscando.
- Sabe algo, dejémoslo así, pueden confiar en que no regreso a Ferrisariato, NUNCA.

De esta anécdota, se puede extraer una pequeña serie de conclusiones:

1.- En Ecuador, la eficiencia guarda correlación en grado inverso a la corrupción, es decir, mayor corrupción, menor eficiencia y viceversa.

2.- Hay una subraza alienígena que se ha mezclado con la especie humana de Ecuador, para generar individuos con alto retraso mental, estrechos de frente y con visión limitada a la punta de su nariz.

3.- Solo en Ecuador, si, solo en Ecuador se puede dar algo tan absurdo como que tengas un producto en existencia y te niegues a negociar para sacarlo de percha, especialmente después de ESPERAR DOS MESES Y MEDIO a que llegue la maldita torre, que dicho sea de paso para los imbéciles que me atendieron que agarren turno y se la metan por donde más les quepa.

4.- No por parecer, forzosamente va a ser.  Quiero decir con esto, que no por dar la impresión (leáse, vender la imagen con una maquinaria poderosa de mercadeo) de ser un grupo corporativo exitoso, serio y eficiente, entiéndase bien, no por dar esa imagen una empresa realmente es lo que dice ser.

5.- Las "políticas de la empresa" en Ecuador se basan en los principios jurídicos de la "Ley del Embudo".  Obviamente los clientes estamos en el extremo angosto.

6.- Si queremos que este tipo de cosas no sigan ocurriendo hay que denunciar (como de hecho acabo de hacerlo) a la Defensoría del Pueblo, y a los otros organismos de Control.  Puede que parezca que no funcione, pero resulta que nunca funciona eso porque nosotros los Auténticos Ecuatorianos permitimos que la mierda siga rebosando de las cloacas sin levantar la voz de inconformidad.

Saludos,

Santhros